La principal diferencia consiste en que l@s usuari@s del Car-Sharing son personas que, aunque no necesitan el vehículo a diario, hacen un uso más o menos habitual del servicio, mientras que el alquiler está dirigido a usos más puntuales.
Por otro lado, al contrario que en el alquiler de vehículos, con el Car-Sharing se puede utilizar el vehículo por períodos mínimos de una hora, no es necesario reservarlo el día entero. La persona usuaria puede realizar la reserva del coche las 24 h del día, 7 días a la semana, acudir a recoger el vehículo y devolverlo al lugar en el que lo recogió al finalizar su uso. L@s usuari@s del Car-Sharing pagan una cuota mensual y pagan el uso del vehículo por horas de uso y kilómetros recorridos.